El gabinete de ministros del presidente Juan Manuel Santos presentó ayer la renuncia protocolaria con el fin de que el mandatario perfile el equipo con el que acabará su Gobierno cuando falta poco más de un año para que deje el cargo.

En una carta dirigida a Santos, los integrantes del Gabinete, además de los directores de departamentos administrativos, altos consejeros y otros funcionarios de entidades descentralizadas, presentaron su renuncia.

En la misiva, que fue leída públicamente por el secretario general de la Presidencia, Alfonso Prada, los firmantes subrayaron su "profundo agradecimiento" por haber tenido la oportunidad de servir a Colombia y dejaron claro que su decisión era motivada exclusivamente por el hecho de que Santos debe perfilar ese último equipo de trabajo.

"(Presentamos la renuncia) entendiendo que en los próximos días inicia el último año de su Gobierno y para que quede en libertad de estructurar el equipo que lo acompañe para el cierre del mismo", reza la carta del gabinete.

Santos concluirá su segundo mandato el 7 de agosto de 2018, cuando asumirá el presidente que sea elegido a mediados de ese año.

Para evitar cualquier suspicacia, los funcionarios también quisieron dejar a consideración de Santos que su renuncia protocolaria es "un acto de lealtad y plena confianza".

Nada más comenzar la epístola, todos ellos expresaron su "admiración" a Santos por su empeño en alcanzar la paz, lo que consideran un "momento histórico".

Al concluir la lectura de la carta, Prada aseguró que con esta decisión el gabinete declara a Santos y a su equipo "en plena libertad" para que estructure el Ejecutivo que desee "para enfrentar su último año" y agregó que aspira "a que cierre con broche de oro y de la mejor manera posible este Gobierno de la paz".

Tras el anuncio se desataron los rumores en los corros periodísticos y sociales, si bien todavía no se han pronunciado Santos ni su vicepresidente, Óscar Naranjo, acerca de los posibles cambios.

Entre los nombres que han saltado al escenario está el de la exministra de Minas y de la Presidencia María Lorena Gutiérrez, que actualmente se desempeña como embajadora de Colombia en Alemania.

Sobre los ministros actuales también se han disparado los rumores acerca de quiénes continuarán y cuáles dejaran el Gobierno el último año.

Entre los nombres más recurrentes está el del titular de Salud, Alejandro Gaviria, diagnosticado recientemente con un cáncer contra el que ya inició un tratamiento mientras ocupa el cargo.

Estas posibles salidas, ninguna de las cuales ha sido confirmada ni insinuada por los protagonistas, se suman a las más recientes que se han ido desgranando a lo largo de los últimos meses de exministros que dejaron el cargo para poder aspirar a las elecciones presidenciales de 2018.

Entre ellos estaba la titular de Trabajo, Clara López, que intentará aunar a la izquierda para su candidatura, o el de Interior, Juan Fernando Cristo, del Partido Liberal, un alfil de Santos que ha jugado un rol fundamental en su trabajo de coordinar la Presidencia con el Congreso.

Entre los retos de Santos está el de mantener el equilibrio entre al amplio número de partidos que sustentan el Gobierno y que incluye a las dos fuerzas políticas históricas que se alternaron en el país desde la independencia hasta 2002, liberales y conservadores.

Además, debe mantener un peso específico para Cambio Radical, que lidera el exvicepresidente Germán Vargas Lleras, su fórmula en las elecciones de 2014.

Vargas Lleras salió del Gobierno en marzo pasado precisamente para poder aspirar a la jefatura del Estado en 2018.

Ahí está otra de las claves, quienes entren ahora al Gobierno no deben tener ambición por integrar una de las futuras fórmulas presidenciales, lo que limita el acceso al Ejecutivo de un amplio ramillete de políticos que ya han mostrado públicamente sus deseos electorales.

Todas esas son las combinaciones que deberá situar Santos sobre la mesa estos días para perfilar su último Gobierno.

EFE